¿No merecía acaso las rosas que me dan? Las sonrisas salen de mi rostro ya sin ser fingidas, suplico a los cuatro vientos que aprendas pero a ti eso no importa, porque no solo de amor vive el hombre ¡carajo! Olvide lo que era ser mujer afuera de una cama, lo olvide pero alguien lo recuerda, alguien no se molesta por quien fui, soy o seré.
Solo piensa en mí y eso me agrada tanto como no tienes idea. No me gustan las comparaciones solo aprecio las ventajas, de verdad que el sentirse tan elogiada, llena de halagos y se cariño, es algo hermoso ¿Por qué me aferro a un pasado que ni tiene intención de mejorar? Y ¿a que no sabes que’ ¡¡¡Me encantan las sorpresas!!!! No me gusta que me digan lo que me planean hacer ¡¡¡Eso me molesta tanto!!! Pero antes no lo sabía.
Ahora lo sé ¡¡¡Me gustan los cortejos, chingada madre!!!
Un regreso poco esperado
Hace 11 años
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